lunes, 28 de diciembre de 2009

Cesc resuelve la cuadratura del triángulo

e encuentran los españolitos algo tristes estas Navidades sin fútbol para disfrutar. Parece que nos falta algo si no vemos media hora al día a Cristiano Ronaldo en la televisión. No me quiero imaginar al pobre Eduardo Inda suspirando por el regreso de CR9 de sus merecidas vacaciones navideñas para poder contarnos que ha pedido un gimnasio a los Reyes Magos. Pero gracias a este parón navideño, hemos podido disfrutar con los cinco sentidos de la sublime actuación de Cesc Fábregas frente al Aston Villa.



El gunner ha demostrado hoy que no hace falta estar 90 minutos corriendo sobre el césped para sorprender al mundo. Le han bastado 23 minutos. 1.380 segundos es el tiempo que estuvo Cesc sobre la hierba del Emirates Stadium. Su ingreso en el partido cambió totalmente el sino del partido. Hasta ese momento, el Aston Villa controlaba sin problemas las embestidas del Arsenal, e incluso comenzaba a desplegar sus alas pensando en un resultado mejor que el empate. Pero llegó el capitán y consiguió resolver la cuadratura del triángulo.

En esos 23 minutos, Cesc no rozó la perfección, la superó con creces. Aceleró la circulación de la pelota en unas pocas décimas, las que diferencian los grandes jugadores de los excelentes. Asumió la toma de decisiones de su equipo, y no cometió ni un solo error. Y por si eso fuera poco, anotó dos goles justo antes de volver al banquillo, lesionado, bajo una atronadora ovación de su público.
 
La actuación del catalán pasará a la historia de la Premier, seguro. Todo el mundo ha podido asistir al encumbramiento definitivo de este jugador. Ya se encuentra a la altura de los grandes gunners de la historia. A la altura de Liam Brad, de Thierry Henry, de Dennis Bergkamp. Jugadores históricos que han escrito gloriosas páginas del equipo inglés y que, desde ayer, tienen como compañero en la eternidad a Cesc Fábregas.

Quizás, lo que más me ha llamado la atención haya sido el primer gol. Sabía que el de Arenys de Mar era un especialista a balón parado. Pero lo tenía como un excelente sacador de córners y faltas laterales. Desde ayer, lo tendré en cuenta también para los libres directos. Un plus que añadir a todas las virtudes que reúne el capitán del Arsenal.

jueves, 17 de diciembre de 2009

Tommie 'Jet' Smith


La historia del deporte la han escrito todos los deportistas que han aportado algo especial a sus disciplinas. Superación, coraje, valentía son algunos de las características que se asocian siempre a los grandes campeones. Pero para llegar al Olimpo del deporte, a ser un mito, una leyenda, se necesita, además, influir de manera especial en las sociedades de la época. Éste es el caso de Tommie Smith (6 de junio de 1944 en Clarksville, Texas) cuya gesta social superó, y casi nubló, a la deportiva.



El 16 de octubre de 1968, en los Juegos Olímpicos de México, Tommie Smith asombró al mundo del deporte en los 200 metros lisos. Y después enmudeció al planeta entero. Han pasado ya más de 40 años, pero su recuerdo sigue imperecedero. Inalterable al paso de los años. Quizás uno de los periodistas que mejor hayan sabido describir su gesta haya sido Santiago Segurola en un artículo escrito hace 11 años en El País: “Aquella tarde, Tommie Smith hizo historia en todos los sentidos. Su nombre evoca lo mejor del deporte y de la dignidad del hombre, representada en una imagen que figura como uno de los grandes iconos del siglo XX: un atleta negro sobre el podio, el brazo en alto frente a la bandera americana, el puño derecho enfundado en un guante negro, la cabeza ligeramente humillada, el oro sobre su pecho, la protesta en el momento de la gloria, el miedo a las represalias, la ebullición de un hombre que temía ser tiroteado”.


En ese instante, Tommie Smith acababa de ganar la final de 200 metros, con un tiempo de 19.83 segundos. Una marca estratosférica para la época. Solamente por esa carrera, Smith ya debería ser considerado una leyenda. Nadie había conseguido bajar de los 20 segundos de forma oficial. La carrera se presentó como un mano a mano entre él y su compatriota John Carlos, que tomó ventaja en la curva. Casi dos metros. Pero los 80 últimos metros de Smith eran insuperables. Apodado Jet por su facilidad para acelerar, Tommie Smith recuperó la desventaja y adelantó fácilmente a Carlos. Los últimos metros de la carrera sirvieron para que el norteamericano pudiera entrar en la línea de meta con los brazos abiertos.

Smith fue un atleta alto (1,91 metros) y ligero. De zancada amplia y elegante. Fue modelo para muchos sucesores en la velocidad pura. Carl Lewis, Donovan Bailey o Usain Bolt son copias modernas de lo que significaba Jet en su época. Estas condiciones naturales le permitieron matricularse en la Universidad de San José State, el paraíso de los atletas americanos. Pero su camino hasta ese día marcaría de manera definitiva su carrera como atleta. Séptimo de doce hijos de un recogedor de algodón de Texas, Smith sufrió en sus propias carnes la discriminación racial de Estados Unidos. La huída de su familia hacia California no mejoró las cosas para él, y siguió sufriendo en sus propias carnes abusos e intolerancia. Estos años de juventud arcaron sin lugar a dudas su personalidad y sus fuertes convicciones políticas.


En San José State coincidió con excelentes atletas (John Carlos, su compañero en el podio, también entrenaba allí) y con una persona que marcaría su futuro, para bien y para mal: Harry Edwards, profesor de sociología en dicha Universidad americana. Amigo de Martin Luther King, Edwars fundó un movimiento de boicot contra los Juegos Olímpicos por la admisión en el Comité Olímpico de Suráfrica, además de pedir la dimisión por racista de Avery Brundage, presidente de dicho comité, y la devolución a Mohamed Alí del título de campeón del mundo de boxeo. A este movimiento, aparte de Smith, se unieron atletas como John Carlos o el jugador de baloncesto Lew Alcindor (que pasaría a la posteridad como Kareem Abdul Jabbar).


Pese a que terminaría acudiendo a los Juegos, Tommie Smith estaba dispuesto a llevar la protesta a un nivel superior. Lo demostró después de su brillante victoria en los 200 metros. Tras la carrera, y justo antes de la ceremonia de entrega de medallas, Smith abrió una bolsa y sacó dos guantes negros: "John, ha llegado el momento. Aquí están todos estos años de sufrimiento, de miedo. Yo voy a hacerlo. Tú decides lo que quieras"."De acuerdo. Yo también lo haré", le dijo John Carlos. Tommie Smith le entregó el guante izquierdo. Él se quedó con el derecho. Tenía miedo. "Tommie, si alguien dispara, ya conoces el sonido. Muévete rápido". Poco antes de salir al estadio para recoger las medallas, se encontraron con un aliado insospechado. El australiano Peter Norman, sorprendente segundo en la final, se interesó por la decisión de los dos atletas estadounidenses. Norman, de raza blanca, dijo que apoyaría su protesta y para acreditarlo se colocó en el pecho una insignia del Proyecto Olímpico por los Derechos Humanos, el movimiento creado por Harry Edwards. Años después, Peter Norman describiría perfectamente lo que significó aquel gesto: “Ellos sacrificaron sus vidas por una causa pacífica en la que creían. Y estar implicado en esa historia como yo estuve, aunque sea de una manera tan pequeña, te marca de por vida”.


El resto es historia. La imagen de los dos atletas negros se recordará siempre como la imagen por la igualdad racial en el mundo. Aquel gesto truncó sus carreras deportivas. Avery Brundage, presidente del COI, los expulsó de la Villa Olímpica, previo despojo de sus respectivas medallas. A partir de ahí, Smith y Carlos sufrieron la segregación racial en silencio. Fueron tratados como antipatriotas y agitadores, recibieron amenazas y sufrieron en silencio la represión social. Décadas después de esa maravillosa e histórica imagen, las primeras voces comienzan a aparecer para reconocer a los dos atletas como símbolos del deporte.


martes, 15 de diciembre de 2009

A un paso del Olimpo...

El F.C. Barcelona comienza mañana su asalto al sexto título consecutivo y último del año. El Mundialito de Clubes es la última meta que tiene el conjunto de Pep Guardiola para entrar en el Olimpo de los deportes. Se podría convertir en el primer equipo de la historia en conquistarlo todo en una sola temporada. Nadie antes lo ha hecho, y se antoja difícil que alguien pueda aspirar a hacerlo en los próximos años.



Se da la situación que, además, el Mundialito de Clubes (antigua Intercontinental) es el único título internacional que falta en las vitrinas del club culé. En el museo del Barça se pueden ver Recopas, UEFAS (2 Copas de Ferias), Copas de Europa, Supercopas de Europa, pero ningún trofeo que acredita, de forma oficiosa, el mejor equipo del mundo. El Barcelona ya lo intentó hace unos años, pero el Internacional de Porto Alegre (comandado por un joven Pato) se interpuso en su camino. Aquel Barça de Rijkaard comenzaba a dar síntomas de agotamiento y ese fracaso aceleró la desmembración de aquel glorioso equipo. Por ahora, estos síntomas no se aprecian en el Pep Team. Por eso, quizás, ésta sea una oportunidad única tras los dos anteriores fracasos (Sao Paolo e Internacional).



Otro que puede hacer historia estos días en Abu Dhabi es Pedrito. Ni Messi, ni Zlatan, ni Henry. Si el canario anotase un gol en las semifinales o final, se convertiría en el primer jugador del Barcelona que consigue anotar un gol en seis competiciones diferentes en un mismo año. En 110 años de historia del club, nadie ha conseguido eso, y viendo el estado de forma y progresión del canario, sería un buen premio para el canterano.

martes, 1 de diciembre de 2009

Impresiones y depresiones después del Clásico

Ha pasado ya un día y todo empieza a asentarse después del impresionante partido que nos brindaron ayer el Barcelona y el Real Madrid. Cada uno se va con un sabor de boca diferente. Estas son mis impresiones y depresiones.

Impresiones:

1- El Real Madrid jugó su mejor partido de la temporada de largo, sobre todo en la primera parte. Frenó el juego del Barça y supo pasar rápidamente de la defensa al ataque. El equipo de Pellegrini no construyó juego ayer, pero su transición en el césped fue de libro.


2- En el planteamiento inicial, el técnico madridista superó a Guardiola, que no modificó nada de su planteamiento habitual. Pero con el paso de los minutos, Pep resolvió sobradamente los problemas de su equipo. Por su parte, Pellegrini erró en los cambios. Dejando a un lado que Cristiano no podía jugar más de una hora, no entiendo el cambio de Raúl ni que Marcelo jugara todo el partido. Este partido también lo ganó el Barcelona.


3- El Real Madrid recibió su propia medicina. Estuvo fallón arriba y recibió un gol en una de las pocas ocasiones claras del rival.



4- Ibrahimovic impone muchísimo a las defensas rivales. Sin estar al 100% metió el miedo en el cuerpo a Pepe y Albiol que no pudieron con él en ningún momento.



5- Cristiano Ronaldo es dinamita pura. Mete miedo solo con su presencia. Pero el Barcelona sabe que para pararle hay que ser un bloque defendiendo. Ayer lo volvieron a hacer. Pero dejaron más libre a Kaká que se marcó una primera parte para enmarcar.



6- Los porteros tuvieron poco trabajo. Valdés y Casillas hicieron dos paradones, más fallo de Cristiano y Messi que otra cosa, pero hay que hacerlos.



7- Dejo el último punto para Puyol. Increíble el partido del capitán blaugrana. Paró más balones que Víctor Valdés. Salvó a su equipo en tres ocasiones. Marcelo, Higuaín y Benzema se toparon el 'tiburón'. Los grandes partidos multiplican o dividen el precio de los jugadores. Visto lo visto ayer, Carles vale 100 veces más que la semana pasada. Es para enmarcar la ocasión que salva frente a Higuaín. Puyol viene de intentar rematar un saque de esquina y acaba abajo en un sprint de más de 100 metros. Os invito a disfrutar de esa jugada.



Depresiones:

1- Henry ya no es delantero centro. Y menos para un equipo como el Barcelona. El francés crea más peligro sorprendiendo y arrancando desde la banda que teniendo a los centrales pendientes de él.


2- Messi tiene licencia para jugar donde quiera, pero Guardiola debería comprender que el equipo tiene más equilibrio cuando la ‘pulga’ arranca desde la banda. El juego del Barça sería mucho más ancho y su presencia en la banda aumenta las prestaciones de Dani Alves por cien.



3- Marcelo no es jugador para el Real Madrid. Pese a sus goles y asistencias jugando de interior, el brasileño no da el nivel que sus compañeros. Tiene partidos buenos pero me niego a creer que pueda llegar a ser un buen suplente.



4- Sergio Busquets cometió el primer error desde que subió al primer equipo. El catalán lo había hecho todo bien, y sorprendía que alguien de su juventud tuviera esa templanza con el Barcelona y la selección. En el ‘Clásico’, por primera vez, su edad le jugó una mala pasada. Guardiola le habrá dado una buena charla en el vestuario.



5- Pellegrini debe recuperar a Granero ya. Ayer, cuando Kaká estaba fundido, el ‘pirata’ hubiera dado aire al medio campo frente a un equipo con diez.

miércoles, 25 de noviembre de 2009

Larga vida al Barça…

Solo ha sido un paso… pero se puede considerar una zancada. El Barcelona se ha impuesto al Inter en un partido muy bueno. Excelente en la primera parte, donde el equipo de Guardiola dejó claro que sigue pudiendo jugar al nivel del año pasado. Aunque solo fueron 45 minutos. Y solo fueron esos, porque en la segunda parte los culés parecían tener la mente en otro partido. Eso, y que el Inter decidió que la mejor manera de evitar una goleada era ponerse duro. La verdad que sufro al ver a Eto’o, Milito o Maicon “jugando” a algo que no se merecen.

Volviendo al Barcelona… Lo peor (o mejor) es el juego del equipo sin Messi e Ibrahimovic. Sin los que se supone que son sus estrellas. Que lo son, pero no son los más importantes. Hasta hace poco, la estrella de un equipo era el jugador imprescindible, pero a partir de ahora vamos a tener que ser más exactos con estos dos términos. Las estrellas indiscutibles del Barcelona son Messi e Ibrahimovic. Son los más mediáticos, los mejor pagados y los más valorados en el mercado. Pero los jugadores imprescindibles son Xavi e Iniesta. El equipo puede carburar sin uno de los dos, pero tengo dudas que lo haga sin los dos a la vez. Si a estos dos genios, les añades a Piqué, Puyol, Dani Alves y Pedrito pues la combinación puede resultar explosiva.

A la lista anterior, hay que unir otros dos nombres, pero creo que merecen un aparte. Estos son Abidal y Keita. ¿Conocen a alguien que le siente mejor la gripe A que al lateral francés? Hacía muchos meses (dudo si alguna vez) que no veía un partido bueno de Abidal. Ayer defendió a la perfección, apoyó a los compañeros para el juego en corto, subió al ataque y ensanchó el campo al máximo cuando fue necesario. La ovación con la que le despidió el Camp Nou no fue gratuita, se la merecía.

El otro caso es Keita. La temporada pasada el africano dejó dudas sobre su fichaje, pero este año está callando muchas bocas. Guardiola ve en él una bendición. Keita no es manco distribuyendo el juego, pero lógicamente no es ni Xavi ni Iniesta. Él lo sabe, y en vez de obsesionarse con eso, prefiere explotar sus virtudes que le hacen diferente a sus compañeros. Despliegue físico e incorporación al ataque marcan su juego. Keita es un trabajador nato y así lo demuestra. Tarda segundos en pasar de la defensa al ataque. Con inteligencia y movimientos correctos siempre está donde se le necesita. Después se incorpora al ataque con mucho criterio. Siempre llega en segunda línea, sorprendiendo a la defensa, con poderío, con gol. Además tiene buen disparo y remate de cabeza. Creo que el Barça puede echar más de menos a Keita que a Touré durante la Copa de África. No digo que Keita sea mejor, pero mientras siga Busquets en esta línea….

jueves, 19 de noviembre de 2009

Suerte no, lo siguiente...


Desde hace muchísimos años, la Fórmula 1 es conocida como el gran circo, por la cantidad de medios y público que arrastra en cada gran premio. Pero desde la temporada pasada se está convirtiendo en el circo de Miliki, por lo menos. En menos de una temporada hemos visto como un jubilado y un piloto en paro se jugaban el título mundial que tanto cuesta ganar. Grandes pilotos no lo han conseguido nunca, y ahora, en la lista de campeonísimos vemos al inconmensurable Button (el adjetivo es irónico. Déjenme explicarlo). Ver a este señor junto a nombres como Schumacher, Hakkinen o Prost me produce urticaria.

Pero no acaba aquí la cosa. Ahora parece que el mejor piloto del mundo (ja ja ja) ha fichado por McLaren. Extrapolando esto al fútbol sería como si Pato Sosa o Renaldo (con E) fichasen por el Real Madrid o el Barcelona. En fin, que esto es una broma y una tomadura de pelo. Tengo ganas de que NO empiece la Fórmula 1. No sé si aguantaré un año viendo a ese inútil al volante de un monoplaza que en la vida se ha merecido ni se merecerá.

lunes, 16 de noviembre de 2009

La mano de... Blatter

Hace 23 años, en México, Maradona maravilló al mundo en un espectacular partido frente a Inglaterra. Fue el principio de su camino hacia el Olimpo del deporte. Camino que se ha llegado a desviar hasta zonas poco nobles, pero que se le perdonan. Recuerden, es Maradona.

El año que viene, en 2010, Diego iba a participar en su quinto Mundial. Pero una canallada lo puso en peligro. Una grosería como casi no se recuerda. Una barrabasada propia de un barriobajero y no de un seleccionador de fútbol. Y menos de una selección como Argentina. Esa exaltación de un triste cuarto puesto puso en duda su presencia en Suráfrica. Pero le han tendido una mano. Otra mano. La de Blatter.

Para el actual presidente de la FIFA, el fútbol es un negocio que está por encima de todo y de todos. Se olvida que esto funciona gracias a los espectadores y a los jugadores. Le gusta pensar que el fútbol es una máquina perfecta engrasada por él. Y en realidad el fútbol ya existía antes que él. Y, por suerte, después de él.

Por eso, y solamente por eso, no podía perderse la oportunidad de tener otra vez a Maradona durante un mes en un mundial. Con el interés que el argentino despierta en los aficionados, en la prensa y, sobre todo, en los patrocinadores. Con esta ridícula sanción, Blatter ha dejado al mundo entero descubrir cómo es en realidad. Lo que le mueve. Una pena, la verdad.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

Papá, ¿por qué somos del Real Madrid?

Me acordaba viendo los últimos minutos del Real Madrid – Alcorcón de una frase, que en tono de mofa, soltó un amigo viendo el enésimo fallo de Perea durante el partido del sábado pasado: “Papá, ¿por qué somos del Atleti? Decía tras ver cómo su equipo se ponía con 0-3 en el Vicente Calderón.

Me acordaba porque ahora mismo este amigo estará lejos de acordarse de aquellos momentos de alegría y euforia. Es posible que esté pensando que el dinero no da la felicidad, al menos en el fútbol. Que es increíble que con la pasta que se gastó Florentino haya pasado esto. Que los jugadores son unos mercenarios (frase atlética donde las haya). Que si los palos. Que si Pellegrini. Que si Lass. Que si Gago… Muchas cosas para intentar sacar de la cabeza lo único claro en este asunto: El Alcorcón ganó la eliminatoria por un global de 4-1.

El fútbol volvió a mostrarle al mundo parte de su grandeza. Ese factor que lo hace único entre todos los deportes. El 4-0 fue algo sorprendente. Humillante para el equipo grande. Pero la victoria madridista de hoy ha sido, incluso, peor. Sonrojante y avergonzante. Ni miedo escénico, ni espíritus, ni nada. El Madrid atacó, disparó y lo intentó, pero en ningún momento se vislumbró ninguna remontada. El Alcorcón defendió sin renunciar a nada. Solo con la ilusión han eliminado a un equipo de 300 millones de euros que ha enseñado al mundo sus miserias. De nuevo.

Pero lo peor no está ahí. Lo más hiriente es que el Santiago Bernabéu se llenó hasta los topes para dar un voto de confianza al equipo. Para hacer llegar ese ánimo en los momentos necesarios. Pero ni con esas. Si al menos solo hubieran ido 20.000 personas, se podría pensar que a nadie le interesaba esta competición. No fue el caso. El coliseo blanco albergó a 80.000 personas en su interior. 80.000 almas que vieron como su ilusión se desvanecía minuto a minuto. El malestar del público rozó lo esperpéntico, terminando en cánticos con sorna hacia sus propios jugadores. La imagen del Bernabéu pidiendo la entrada de Marcelo o Drenthe no hace más que alejar a estos dos jugadores del equipo. No tienen cariño ni apoyo de la afición, y sus actuaciones dejan mucho que desear. Por cierto, que el seguidor blanco ya tiene su veredicto en la guerra abierta entre Pellegrini y Guti. El chileno tendrá que cumplir condena, tarde o temprano.
Y no nos olvidemos que con esto, ya no hay posibilidad de conseguir el ansiado triplete. Ciertos sectores mediáticos lo vendieron como posible, probable y al alcance de la mano. Dos meses han bastado para aplazar esa ilusión otro año más.

p.d. Paradójicamente, el presidente del Real Madrid decía por la mañana en los deportes de Cuatro que el club necesitaba “recuperar su sitio en el panorama internacional”. Esas palabras, a esta hora de la noche, son mucho más dolorosas. El equipo no solo ha caído en Copa contra un Tercera (la 2ªB es la tercera división española), sino que en ningún momento se ha mostrado superior a su rival. Llega el mercado de invierno. Cuidado.

jueves, 25 de junio de 2009

Del Bosque necesita reflexionar

Pues ya está. La Copa Confederaciones, que solamente valora el que la gana, se ha terminado para España después de una sorpresa mayúscula, se mire por donde se mire. Estados Unidos es una buena selección, pero nada más, y una derrota frente a ellos no deja de ser por fallos propios más que por otra cosa.

La verdad que esta copa me deja una sensación de pérdida de tiempo enorme, para jugar frente a Nueva Zelanda, Irak, Suráfrica y Estados Unidos. Vamos que si nos dicen que en vez de la Copa de Confederaciones son amistosos de preparación para el próximo Mundial, nos lo creemos. Pero yo creo que el mal sabor de boca ha sido casi por la mala imagen dada en ciertos momentos que por otra cosa.

No digo mal juego, digo mala imagen. Sobre todo del entrenador que ha demostrado tener poca capacidad de improvisación y recelar de aquello que nos ha hecho grandes en esto del fútbol. Del Bosque heredó un equipo maravilloso, diferente, único. Luis Aragonés consiguió dotar a la ‘Roja’ de un estilo propio, alejado de aquella furia tan arcaica que nos acompañaba por todo el mundo. Aquel equipo se caracterizó por el toque en corto, los apoyos, la creatividad en los metros finales y la seguridad defensiva. Ayer frente a Estados Unidos se vio el final de un proceso que comenzó cuando Del Bosque se sentó por primera vez en el banquillo de la selección.

El técnico salmantino ha querido poner su propio sello en este equipo, y le está saliendo mal. Jugamos muy bien, sí, pero no es lo mismo. Desde el principio, Del Bosque ha querido jugar con al menos un jugador de banda puro y aumentar el ritmo de toque y ataque mucho, acelerar el tiqui-taca. No ha dado buen resultado. Ese toque lento de España mataba a los rivales. Les permitía replegarse pero les hacía correr el triple de un lado del campo al otro. Para los mediocentros contrarios era un suplicio. Acababan ahogados y el equipo se partía por ahí.

Lo de jugar por las bandas es diferente. A Del Bosque le gustan los extremos. Recuperó a Riera para la selección, hizo debutar a Capel y Mata. De estos dos tiene más futuro el segundo, ya que el primero, pese a que jugó bien con la ‘Roja’, no entiende el fútbol colectivo y se enfrasca en sus regates.

Con este jugador de banda, hemos perdido un “tocón”, un “bajito”… En definitiva, hemos perdido a uno de los que nos dio nuestro sello de identidad. Quiero entender que la titularidad de Riera es por la baja forma de David Silva, un titular fijo y pilar básico del ataque español con Iniesta. Pero es que ahí no acaba el asunto. Ayer frente a Estados Unidos, de los bajitos solo estaban Xavi y Cesc en el equipo titular. Muy pocos socios para el mediocentro del Barcelona, que crece cuando tiene compañeros alrededor con los que asociarse. Lejos de arreglar esto, Del Bosque en la segunda parte decidió dar entrada a Cazorla por Cesc. Es decir, otro jugador de banda y menos apoyos para Xavi. Un error se mire por donde se mire. El cambio podría haber sido bueno si hubiera quitado a Riera o a un delantero, que ayer no estuvieron en ningún momento. Resultado: España como quiere Del Bosque, con dos mediocentros, dos bandas y dos delanteros. El gran equipo construido por Aragonés, desaparecido. Poco más tarde, entró Mata (otro jugador de banda). En el banquillo esperaba Silva. Incluso Llorente merecía la oportunidad de entrar, ya que siempre se creyó que serviría para abrir partidos como los de ayer, pero Del Bosque mostró poca cintura, la verdad.

Lo mejor es que Del Bosque tiene un año para reflexionar, y seguro que lo hace. No es obtuso ni mucho menos. Acepta la crítica y la sabe poner a su favor. Esa es la esperanza de la selección para el Mundial.

viernes, 19 de junio de 2009

¿Es un fracaso?

Pues sí. Y con todas y cada una de las letras. La actuación de la selección española en el Europeo sub'21 deja mucho que desear, sobre todo con el equipazo que se desplazó hasta tierras nórdicas. ¿Los culpables? Pues todos. Jugadores que no han dado el nivel. Un entrenador que nunca lo ha tenido. Y, también, un Director Deportivo que se lleva equivocando desde el primer día que accedió al cargo. Pero vayamos por partes.
Mucho se ha hablado de que la selección que acudía a Suecia era una de las mejores de toda la historia de las categorías inferiores de España. 23 jugadores de los que solamente los porteros suplentes no eran casi indiscutibles en sus equipos. Algunos de ellos pertenecen al Real Madrid o al Barcelona (Miguel Torres, Javi García, Bojan...) donde comparten vestuario con algunos de los mejores jugadores del mundo. Otros ya habían debutado con la selección absoluta (Bojan y Capel), y alguno de ellos son los auténticos jefes de sus equipos (Granero, Jurado, Javi Martínez...). Pero ni aún así. Después de dos partidos, 180 minutos, cero goles y una sola ocasión de gol clara (remate de cabeza al larguero frente a Alemania). Más claro agua.
Algún futbolista ha estado fuera de onda. Bojan ha rendido a un nivel pésimo. Raúl García y Javi Martínez son dos jugadores del mismo corte que no crean fútbol ni aunque lo intenten. Jurado ha estado sobremarcado y en ningún momento ha tenido la inteligencia de usar ese hándicap a favor de su equipo. Y la defensa ha mostrado más inseguridad que otra cosa. Solamente se salva Sergio Asenjo. El palentino ha conseguido revalorizarse en una Eurocopa en la que todo ha sido negativo para España. El Atlético no ha llegado todavía a un acuerdo con el Valladolid, y después de sus actuaciones, el club blanquivioleta tiene todo el derecho del mundo ha pedir lo que crea oportuno por su guardameta.
Hasta aquí los jugadores. Pasemos al entrenador. Don Juan Ramón López Caro. ¡Vaya papelón! Este hombre nunca ha sido santo de mi devoción. Pero desde hoy tendré la opinión de que se equivoca más que un reloj parado. Ha planteado los dos partidos que ha jugado con miedo a perder. Defensivo. Reservón. ¡Vaya cagada!
En el primer partido frente a Alemania le mostró un miedo excesivo a Mesut Özil, que no pasa de ser una buena promesa para el Werder Bremen. Se preocupó más de incomodar al mediapunta alemán que de crear juego. López Caro es un entrenador que no tiene una idea preconcebida del fútbol. Y eso es malo. No sabe si quiere jugar con extremos, con dos delanteros, con mediocentro defensivo, con doble pivote... ¡Y así le va! Frente a los germanos su impresionante mente futbolística le convenció de que su mejor creador (Jurado) debía jugar en banda izquierda facilitando que Alemania pudiera hacerle un 2 contra 1 constante, cuando no era 3 contra 1. Además, decidió que Bojan Krkic jugara arriba solo. Una decisión poco comprensible cuando te dedicas a colgar balones para que luche con centrales que le sacan una o dos cabezas al delantero del Barcelona.
Ayer, frente a Inglaterra, jugándote casi la vida, la cosa no fue mucho mejor. López Caro se dio cuenta de sus errores en el partido anterior (que fueron muchos) y decidió cambiar algunas cosas. Pero se volvió a equivocar. No tiene capacidad para acertar. Solo queda esperar que suene la flauta algún día. Y se equivocó porque el cagómetro lo tenía por las nubes. Frente a Inglaterra, ante el poderío físico inglés, decidió colocar tres hombres en el centro del campo. Raúl García, Javi Martínez y Mario Suárez (agradable sorpresa para el Mallorca). Por delante de ellos, Jurado, Bojan y Adrián. Sin bandas, atasco por el centro, los laterales no suben. Muy fácil para los ingleses. Además coloca al tronco de Javi García como central y a la media hora ya había cometido un penalty y se había librado de dos amarillas claras.
López Caro ha demostrado que no tiene el nivel para entrenar a la sub'21. Igual que demostró no tener el nivel para entrenar al Real Madrid, al Celta, al Levante. Y diría que al Racing, pero por suerte para los cántabros, López Caro les dejó vendidos al mes de firmar. Pero bueno, también tendrá culpa el que eligió al entrenador, ¿no?
Esto me lleva a Fernando Hierro, Director Deportivo de la Federación Española de Fútbol. Gran jugador en su época, pésimo ejecutivo y amigo de sus amigos. Y a eso se dedica. Desde el 2007, fecha en la que llegó a la selección, sus decisiones han estado teñidas por un amiguismo que desde muchos sitios se ha confundido con madridismo. Y no les falta razón.
Eligió a López Caro (pasado madridista) para la sub'21. Un entrenador con mal currículum y que no ha mostrado capacidad en ningún momento. Además, Hierro quiso echar antes de tiempo a Aragonés para traer a su amigo Del Bosque. Presionó para que Aragonés se reuniera con Raúl con motivo de la no-convocatoria del 7 blanco con la selección. Tuvo una bronca teléfonica con Guardiola por la lesión de Iniesta. En fin, todo muy blanco en sus decisiones. Como la camiseta del Real Madrid que él defendió hasta que Florentino le echó... por defender a Del Bosque, por cierto.
Con este panorama, la mejor selección sub'21 española de la historia se va a ir para casa antes de tiempo. Solo hay que ver si nos vamos con la honrilla de ganar a la todopoderosa Finlandia... ¿Conocen algún jugador? Yo tendré que mirarme la plantilla antes del partido.

miércoles, 20 de mayo de 2009

Secretarios técnicos, hagan un favor a sus equipos...

Si usted es secretario técnico de un equipo de Primera y ha visto la final de la UEFA tendría que estar intentando localizar como fuera al representante de Darijo Srna (Metković, Croacia, 1 de mayo de 1982). ¡Qué jugón!

En la última Eurocopa ya me fijé en él. La primera fase de Croacia me encandiló (sobre todo su victoria frente a Alemania). Srna, Modric, Rakitic y Kranjcar daban un aire muy vistoso al equipo croata. En aquel torneo, Darijo jugó de centrocampista por la derecha, pero en su club, el Shakhtar Donetsk, ocupa el lateral derecho. Un puesto casi vacío en el fútbol español.

Realmente creo que Srna puede encajar perfectamente en el fútbol español (me suena que el Betis se interesó en él). Es rápido, buen manejo de balón, ataca como el mejor y defiende más que correctamente. Además es un especialista a balón parado y eso siempre es un plus. No estoy diciendo que pueda quitarle el puesto a Dani Alves en el Barça o Sergio Ramos en el Madrid (aunque creo que es mejor que el español en esta posición), pero lo que sí digo es que sería indicutible en el Atlético de Madrid, Sevilla, Betis, Deportivo... Solamente me entran dudas con el Valencia (Miguel me parece un muy buen lateral) y el Villarreal (Javi Venta y Ángel dan mucho nivel a esa posición).

Darijo Srna ha jugado solamente en el Hajduk Split y en el Shakhtar. Tiene 27 años, y después de levantar la UEFA es posible que quiera un nuevo reto en una liga potente europea. Eso sí, su ficha será alta porque el equipo ucraniano paga muy bien. La negociación será difícil, y sino que se lo digan al ex del Shakhat y ahora en el Zaragoza, Matuzalem.

jueves, 14 de mayo de 2009

Belleza infinita para el primer título

Lo mejor que se puede hacer es no enfadarlos. Porque si lo haces, lo normal es que te caigan cuatro. Este Barcelona era hasta ayer el equipo que hacía mejor fútbol del mundo... pero sin títulos. En Valencia han puesto la primera piedra para marcar una época en el fútbol mundial. Época que durará lo que dure el hambre de títulos de los jugadores, la habilidad de los dirigentes y el mando de Guardiola, auténtico artífice de este "milagro" y que, paradójicamente, hoy no sale en ninguna portada.
El partido tuvo mucha más historia de la que refleja el resultado. Salió muy centrado el Athletic, con las ideas claras y sabiendo cuál era el guión que le convenía. Pero en el minuto 9 se equivocaron. Fatídico minuto 9 a partir de ahora en la historia del club rojiblanco. Yeste botó un corner desde la derecha de manera formidable. En el segundo palo, Toquero se imponía en el salto a Keita y Xavi (un tanto pasota defensivamente). Gol. Alegría desenfrenada para el Athletic. Pero era una mala noticia.
Estoy seguro de que a Caparrós no le gustó nada ese gol por lo que podía pasar... y por lo que pasó. El tanto de Toquero terminó por aclarar las ideas del Barcelona. Desde ese momento se pusieron a jugar, a tocar, a combinar, a rematar... El Athletic imitaba el partido del Chelsea en Stamford Bridge con una sola diferencia: se olvidó de atacar. El conjunto inglés se adelantó pronto, como el Athletic, pero supo mantener su nivel ofensivo durante los 90 minutos. El Athletic no. Desde el gol, Toquero se retrasó para molestar a Busquets. Y Llorente tapaba como podía la salida de balón. Resultado: Los 11 jugadores rojiblancos en su campo y muchos metros hasta Pinto. Era cuestión de tiempo que el cansancio y la fatiga mostraran los huecos en la defensa bilbaína.
Y el hueco lo encontró un central. Touré festejó su cumpleaños con un golazo que quedó empañado por su feo gesto (merecedor de sanción). Etoo se disculpó con la afición de su parte y Xavi le reprendió por los cortes de manga. Ese gol fue un auténtico mazazo para los vascos que desaparecieron. El Barça quiso terminar cuanto antes el partido y eso hizo en la segunda parte. Tres goles casi seguidos que desataron la fiesta en Canaletas. Los últimos 20 minutos sobraron. El Athletic bajó los brazos y el Barça no quiso hacer sangre. La decepción en Bilbao fue enorme, pero tambien lo ha sido su trayectoria en la Copa. Excelente. Como sus primeros 15 minutos de ayer. Pero no pudo ser. El Athletic se ha demostrado que puede competir siendo fiel a sus ideas, a su filosofía. Y eso es una muy buena noticia.
Por su parte, el Barça también ha demostrado que puede ganar títulos con su manera de jugar, siendo perfeccionistas, rozando la belleza en todas sus líneas. Los culés este año han rozado la perfección, superando incluso lo exhibido por la Roja en la Eurocopa. Una auténtica gozada.
p.d. Lamentable no, lo siguiente. Así se puede definir el comportamiento de las hinchadas durante el himno. Pero peor aún fue la actuación de TVE realizando conexiones con Bilbao y Barcelona. Fue más falta de respeto eso, que los propios silbidos. Además de un ejercicio de desinformación y manipulación propio de la época del defenestrado Urdaci.